miércoles, 30 de noviembre de 2011

Y un día llegamos a Los Angeles



15 años alcanzaron para volver los cañaverales infinitos y la maleza impenetrable, para que la tierra esconda los rieles y hasta para que los árboles crecieran altos y fuertes en medio de la vía. 15 años parecieron los suficientes para olvidar los trenes, para apagar la esperanza, para resignarlo todo. 

Pero un día, allá a lo lejos, empezó a verse la luz de una zorra. "No, no puede ser. Están locos" "¿Para qué van a venir? No van a llegar". Sin embargo, la luz se fue volviendo cada día más intensa. Y los que no creían, empezaron a creer. Cada vez faltaba menos para visualizar el disco que anunciaría la llegada a un nuevo hito para hacer historia. Despacio, eso sí. Muy despacio. Pocos saben lo que fue dejar atrás entoscados que parecían trampas, terraplenes enteros obstruidos, montes espesos y absolutamente cerrados. 
 

El domingo 27 de noviembre de 2011 a las 16.46 será recordado como el momento en que las zorras de la Asociación Amigos del Belgrano tocaron la plataforma de la Estación Los Angeles, constituyendo el primer paso de vehículos ferroviarios por ese lugar desde agosto de 1997 y la recuperación definitiva de un nuevo tramo de tendido, que ahora totaliza 127 kilómetros de vía rescatada del abandono, preservada y mantenida de forma totalmente artesanal y voluntaria. Una extensión mayor que la de cualquier concesión urbana de pasajeros. 127 kilómetros listos para que vuelva a pasar el tren.   

Queremos agradecer especialmente a cada uno de los socios que desde 2005 hasta hoy removió una palada de tierra para hacer realidad este sueño. A los amigos que siempre están cerca. A las comunidades de cada localidad por la que pasa la trocha, especialmente a las de Tres Sargentos y Los Angeles. Gracias por ayudarnos a prolongar el sueño y sumar una estación a nuestro itinerario. Es momento de festejar. Berdier nos espera.



Asociación Amigos del Ferrocarril Belgrano


Galería de fotos de Mariana Corti

Galería de fotos de Nico Di Rosa

Galería de fotos de FernandoDSC

Crónica de
Truenotour, de Susana Gioacchini